El Amor es una energía.
Es la fuerza más poderosa de la Naturaleza. Nada podría sobrevivir sin Amor. No sería posible la existencia si no fuera por la presencia de esa fuerza extraordinaria.
El Amor es la energía de sustentación de los universos e impregna todas las estructuras, desde las más elementales hasta las más complejas.
Es la esperanza que hace despertar las voluntades.
Es la sonrisa del alma y del espíritu.
Es el equilibrio y la armonía universal.
Es el llanto de un niño, la sonrisa de una flor, el perfume del viento, la sinfonía de los mares, el canto del trueno, todo es amor, DIOS es amor.
Todos podemos recibir y producir Amor porque….
Cada vez que se escucha, se genera Amor,
Cada vez que se perdona, se genera Amor,
Cada vez que se habla dulcemente, se genera Amor,
Cada vez que se ayuda a los demás, se genera Amor,
Cada vez que se canta con alegría, se genera Amor,
Cada vez que se ora o se medita, se genera Amor,
Cada vez que se abraza de verdad, se genera Amor,
Cada vez que se mira con compasión, se genera Amor,
Cada vez que se cuida a alguien desvalido, se genera Amor,
Cada vez que se sueña, se genera Amor,
Cada vez que se llora, se genera Amor,
Cada vez que se espera con esperanza, se genera Amor.
El Amor es la más clara manifestación de la existencia de DIOS.
Está presente en cada actitud, en cada gesto, en cada iniciativa emprendida.
El Amor es la fuente primigenia. La palabra creadora, la esencia de la Paz.
Es el signo de la libertad, expande las conciencias, diluye las barreras y dibuja los horizontes y los amaneceres.
Diálogos con Esdeihewe (1)
Ángel Luis Fernández
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